Durante el embarazo y el parto, debido a la estructura de la pelvis de la mama, o del encajamiento del bebe, o del parto, los huesecillos de la cabeza del bebe, sus fascias, sus nervios, su columna, se ven sometidas a muchas tensiones, comprensiones, y todo esto puede repercutir en la lactancia materna.
Hay determinados signos que nos pueden ayudar a detectar que nuestro bebé tiene problemas en la lactancia. Algunos de ellos son: